La calidad de la comida aquí es inferior en comparación con otros establecimientos gastronómicos del vecindario. El servicio es terrible, y el personal parece cansado e irritado. El propietario pasa todo el día sentado y charlando sin hacer nada productivo. Además, este lugar no admite perros. No puedo recomendarlo en absoluto. En su lugar, da un paseo de 7 minutos hacia Malinska y visita un lugar como Maslina. Ofrecen mucha mejor comida fresca, un excelente servicio y precios similares. Definitivamente notarás la diferencia.