Esta es una playa popular entre los pescadores que vienen a capturar langostas y otros mariscos. A pesar de la presencia de villas al otro lado del rĂo, esta playa ha logrado mantener su ambiente no turĂstico. AquĂ no encontrarás protector solar, bares ni bebidas suaves. En cambio, estarás rodeado de elementos naturales como la arena y materia orgánica, e incluso podrĂas encontrarte con un lugareño sorprendido de verte.
Esta playa es una autĂ©ntica joya, con una atmĂłsfera impresionante y serena que sin duda te dejará sintiĂ©ndote renovado y rejuvenecido. La arena negra Ăşnica añade a la belleza natural de los alrededores, haciendo de esta una experiencia verdaderamente inolvidable. Aunque hay una tarifa por el uso del baño disponible, es un pequeño precio a pagar por el privilegio de disfrutar de este pedacito de paraĂso. No es de extrañar que tanta gente crea que la naturaleza es la mejor sanadora, y esta playa es prueba de ello.
Esta playa es una autĂ©ntica maravilla con su impresionante arena negra que sin duda te dejará boquiabierto. Las rocas que adornan la costa son verdaderamente magnĂficas y añaden a la belleza natural de este lugar. El momento perfecto para visitarla es durante las horas del atardecer, donde el cielo se pinta con una mirĂada de colores, lo que hace que sea una experiencia verdaderamente impresionante.
Costa aislada con un encantador templo hindĂş (lamentablemente cerrado al ingreso) situado en su periferia. El camino que conduce a la playa es una carretera estrecha más adecuada para motocicletas. En el lado este de la playa, hay un pequeño acantilado con un saliente (mira hacia arriba para presenciar la impresionante palmera que crece hacia abajo y luego hacia arriba) que ofrece sombra en un dĂa abrasador.