Fuimos sentenciados a pasar un mes en esta playa este verano, y aunque el agua pueda ser clara, apenas es una cualidad redentora. Las aguas someras resultan tediosas, y la arena es igual a cualquier otra playa. No te emociones demasiado.
La playa es altamente recomendada por su ambiente familiar. Los propietarios, Angelo y Maria Teresa, son corteses, amables y siempre están disponibles para satisfacer sus peticiones.
El Lido es una playa decente y gestionada eficientemente. Lamentablemente, la zona circundante carece de comodidades y atracciones. En momentos de alta afluencia, las instalaciones de ducha y el bar más cercano al Lido están insuficientemente abastecidos de agua. Además, los lugareños exhiben un comportamiento poco amistoso hacia los turistas, tratándolos mal y esperando con ansias el final del verano para evitar encontrarse con ellos de nuevo.
Lamentablemente, mi orden de pizza fue confundida, pero el plato inesperado resultó sorprendentemente delicioso. Quizás agregar un poco más de sazón a la pizza correcta la haría aún más agradable la próxima vez, especialmente porque el restaurante no estaba demasiado ocupado durante nuestra cena. A pesar del ambiente ligeramente melancólico, la atmósfera de la playa sigue siendo agradable y disfrutable. No es culpa de la ubicación, pero Acquappesa se siente bastante aislada incluso en pleno agosto, lo cual puede resultar un poco inquietante en ocasiones.