¡Esta playa fue genial! Incluso en un sábado ocupado, pudimos encontrar un lugar a la sombra. Solo ten cuidado si decides entrar al lago cuando el agua está baja, ya que las algas hacen que las rocas sean muy resbaladizas y puede ser difícil salir. ¡Las vistas de las montañas eran impresionantes y había lagartijas por todas partes!
Este impresionante destino presume de un paisaje impresionante, completo con acogedoras calas que proporcionan un fácil acceso al lago para los jóvenes. Contempla el agua y disfruta del pintoresco panorama de Salo, situado justo al otro lado. Los precios de los refrescos y la comida son razonables, convirtiendo este lugar en un punto de encuentro privilegiado para relajarse. Descansa en cómodas tumbonas y absorbe el sol mientras saboreas los serenos alrededores del lago y la ciudad.
Esta es una bonita playa con agua decente y algunas comodidades. Es un poco más tranquila aquí, pero convenientemente ubicada cerca de una zona de mercado bulliciosa.
Esta espléndida playa es una verdadera joya, y además, ¡es completamente gratuita! Se encuentra en las cercanías de un encantador bar donde puedes saciar tu sed y rejuvenecerte. La playa está ubicada en un pintoresco rincón del Lago di Garda y presume de un agua centelleante y cristalina que te dejará sin aliento. Aunque puede ser un poco difícil encontrar estacionamiento para tu vehículo, puedes llegar fácilmente a la playa a pie, en transporte público o en bicicleta. Personalmente, me aseguro de visitar este encantador lugar tan a menudo como sea posible.
Esta playa es perfecta para los dueños de perros, con agua cristalina y la opción de estacionar por una tarifa. Además, hay bares, restaurantes y instalaciones de baño y ducha cercanas. El paseo marítimo que conduce al puerto de Moniga también es bastante pintoresco.