Esta impresionante costa se encuentra a un corto paseo en barco de Saranda, con una pintoresca extensiĂłn de pequeñas gravas. Las cristalinas aguas turquesas son cálidas e invitantes, perfectas para un refrescante baño o un paseo relajante por la orilla. Un puñado de bares y restaurantes encantadores salpican la playa, ofreciendo un delicioso sabor de la cocina local. Este lugar idĂlico es una visita obligada para cualquier amante de la playa.
Esta playa es una verdadera joya, fácilmente accesible en coche y con impresionantes olas cuando el viento sopla. Sin embargo, vale la pena señalar que el terreno empinado puede no ser ideal para familias con niños pequeños. La variedad de restaurantes y tabernas aquà es impresionante, cada uno con su propio aparcamiento gratuito. Aunque tendrás que pagar por sombrillas y tumbonas (que van desde 700-1000lek), los precios son un poco más altos que en la cercana Vlore. Pero no dejes que eso te desanime: la comida en La Casa Del Mare es simplemente deliciosa y vale la pena la visita.
Recientemente visitĂ© una playa que tenĂa guijarros blancos y finos. Durante mi corto viaje, di un paseo tranquilo alrededor del castillo que rodea la playa.
Esta playa es realmente una de las mejores en las que he estado. El agua está limpia y no hay demasiadas personas alrededor. Además, hay pequeños arroyos de agua dulce que fluyen a lo largo de la playa, justo debajo de las piedras.
La playa es accesible al público de forma gratuita. Además, hay un camino que lleva a un bunker. Si subes por el camino, eventualmente encontrarás un arroyo. Además, si continúas por el camino bien marcado durante aproximadamente 2,5 kilómetros, llegarás a Pikeras.
El camino que lleva a la playa puede resultar un poco desafiante, ya que son aproximadamente tres kilĂłmetros de terreno off-road. Además, la playa en sĂ puede ser bastante rocosa y estar llena de algunos escombros. Sin embargo, el agua es absolutamente impresionante y cuenta con un hermoso tono turquesa. Además, la bahĂa está bien protegida de cualquier ráfaga de viento, lo que crea un ambiente tranquilo y sereno.