La playa, ubicada en las cercanías de Atenas, puede parecer hermosa a primera vista. Sin embargo, al examinarla más detenidamente, se hace evidente que en realidad hay tres playas separadas, ninguna de las cuales es particularmente impresionante. La llamada playa más bonita no es más que un pequeño golfo, que carece de cualquier comodidad como sombrillas o tumbonas para alquilar. Los visitantes se quedan solos, sin apoyo ni comodidad proporcionados. En general, la playa es un destino decepcionante, que no cumple con su promesa inicial.