¡Vaya, las felicitaciones definitivamente están en orden! El cajero mencionó que dejar una revisión era opcional, pero no pudimos resistirnos a elogiar este lugar. La comida aquí es de primera categoría, especialmente el Tonnarelli con langostinos y pistacho. Me aseguré de felicitar al chef por eso. También disfrutamos de una dorada marina deliciosamente fresca con papas horneadas, y la copa de vino blanco era excelente. El personal de las mesas fue atento y complaciente, lo que se sumó a la experiencia general. Realmente tienes que intentarlo. El establecimiento en sí es bien mantenido y acogedor, con muchas opciones de asientos. Condujimos desde Roma, lo que nos llevó unos 50 minutos, pero valió la pena. Definitivamente volveremos en el futuro. Gracias de nuevo, Vanessa y Stefano.