La playa parece estar bien equipada con todas las comodidades necesarias para un día de relajación. El personal es amable y atento, asegurándose de que cada visitante se sienta bienvenido. La música de fondo es sutil y discreta, y a las 13.30, el volumen se baja para respetar la siesta. La música cambia diariamente, presentando una variedad de géneros para satisfacer el gusto de todos. La playa es adecuada para familias de todo tipo, con comodidades como una mesa de ping pong, dos mesas de futbolín, toboganes, columpios y juegos para los más pequeños. Los gerentes siempre están en movimiento, manteniendo el área limpia y ordenada. La zona de bocadillos, restaurante y bar es bastante espaciosa, ofreciendo amplios asientos para todos. El personal es receptivo a los comentarios y rápidos para hacer cualquier cambio necesario, como agregar una silla de ruedas para que los visitantes discapacitados puedan usar el baño. Disfrutamos mucho de nuestro tiempo en la playa y definitivamente volveremos. El equipo que dirige la playa es trabajador y dedicado, asegurándose de que los visitantes tengan una gran experiencia. Las sombrillas están espaciadas adecuadamente, proporcionando suficiente sombra sin sentirse abarrotado.