¡Oh, contempla la maravillosa playa, donde la arena está repleta de tesoros dejados por visitantes anteriores! Es como una búsqueda del tesoro, pero en lugar de premios, debes esquivar botellas de plástico y envoltorios desechados. Y no olvidemos el aroma del mar mezclado con el dulce olor de la basura en descomposición. Verdaderamente, un paraíso para aquellos que disfrutan de un poco de aventura en su experiencia de tomar el sol. Solo asegúrate de traer tus propias bolsas de basura, ya que el servicio de recolección de residuos parece estar tomando un enfoque relajado. De hecho, es tan relajado que prácticamente no existe. Pero, ¿quién necesita una playa limpia cuando se puede tener la emoción de tropezar con una chancla olvidada de alguien más?