Esta playa es realmente impresionante, con aguas cristalinas y arena blanca y suave. Si bien es cierto que Disney podría eventualmente restringir el acceso a la playa, el lado atlántico todavía ofrece una experiencia maravillosa. Sin embargo, si estás dispuesto a hacer una caminata de 3 millas hasta el lado caribeño, serás recompensado con una playa impresionantemente serena. Es lamentable que Disney haya cerrado el camino que solía llevar a la playa, pero su decisión solo ha agregado al atractivo de esta joya escondida. Los letreros que prohíben las fotos, los videos y la transmisión en vivo pueden parecer restrictivos, pero solo agregan al sentido de exclusividad y privacidad. Es sorprendente pensar que una empresa de otro país trataría de controlar lo que sucede en una playa pública, pero centrémonos en la belleza de este lugar y disfrutémoslo mientras podamos.