Prepárate para embarcarte en un viaje hacia un oasis oculto de tranquilidad, donde las aguas son cristalinas y la arena es tan suave como la piel de un bebé. Sin embargo, ten en cuenta que este paraíso no es apto para los débiles de corazón, ya que se requiere una caminata de 15-20 minutos por terreno rugoso e irregular para llegar. No te preocupes, el viaje vale la pena, solo asegúrate de empacar suficientes suministros y llevar todo contigo cuando te vayas, ya que no hay contenedores para desechar tu basura.
Un consejo, evita seguir la ruta de conducción de Google Maps, ya que te llevará por un peligroso camino de tierra que no lleva a ninguna parte. En su lugar, dirígete al pueblo de Figueira y sigue la señalización marrón que indica la playa de Figueira a lo largo de R. Praia da Figueira. Una vez que llegues al final del camino estrecho, el estacionamiento será obvio.
Así que prepara tus maletas, ata tus botas de senderismo y prepárate para experimentar la belleza de esta playa aislada. Solo recuerda dejar solo huellas y llevar solo recuerdos.