Esta playa es una elección excelente para familias con niños pequeños ya que el agua es poco profunda y agradablemente cálida. Además, cada tarde el cielo se adorna con coloridas cometas voladas por kite surfistas, proporcionando un espectáculo encantador tanto para niños como para adultos. Es una oportunidad excelente para capturar algunas fotos inolvidables del paisaje pintoresco.
Esta playa es una auténtica joya, enclavada en medio de la nada. La arena es tan fina y prístina que caminar sobre ella es como flotar en una nube. El agua es tan cristalina y poco profunda que bañarse en ella es como sumergirse en una piscina gigante. Es el lugar perfecto para escapar del ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana y simplemente relajarse en el abrazo de la naturaleza. Créeme, no querrás abandonar este pequeño paraíso.