The place is as beautiful as all the bays in Italy. The service is good, offering BBQ, salads, drinks, and snacks, but the entrance fee could be more affordable. As usual, foreigners face "special" prices for entrance and other services, but it's manageable. The sea is stunning, though the waves make it challenging to enter and exit, and the slippery stones can lead to scratches and bruises. Another major issue for foreigners is the complete lack of Wi-Fi. Due to the terrain, there is no good GSM signal, and even with paid mobile internet, you can't call a taxi (such a rip-off here 😠😠😠😠😠).
La playa es verdaderamente encantadora, sin embargo, el costo de alquilar sombrillas y tumbonas parece ser exorbitante.
La comida fue excelente y el personal fue muy acogedor. La presentación de la comida fue impresionante y la atmósfera fue encantadora.
Llegamos a la playa a las cuatro de la tarde y nos sorprendió descubrir que el precio del boleto era de 12€ por persona. Dudamos en pagar ya que habíamos tenido la impresión de que la playa era gratuita. Sin embargo, la persona en la entrada nos ofreció una tarifa reducida de 6€ por persona. Observamos que los bares en la playa cerraban a las seis de la tarde, por lo que preguntamos si podíamos quedarnos después de ese tiempo. Aceptaron, y pasamos una hora allí. Sin embargo, a las cinco de la tarde, nos informaron que teníamos que irnos porque todo estaba cerrando. Lamentablemente, no había otras salidas excepto a través de los bares, por lo que sentimos que habíamos pagado por nada. Fue una experiencia decepcionante.