Esta playa está convenientemente ubicada cerca del corazón de la ciudad y cuenta con una ruta escénica impresionante para llegar allí. No obstante, es importante señalar que las piedras son de gran tamaño, rocosas e increíblemente resbaladizas. Sin zapatos de agua, encontré difícil mantener mi equilibrio y navegar por el terreno. Es posible que esto haya sido una ocurrencia temporal. A pesar de este contratiempo, la comida es deliciosa y el personal es sumamente servicial, lo cual merece una evaluación alta en mi opinión.