Esta playa es impresionante, pero es mejor evitar visitarla durante los meses de julio y agosto. Para acceder a la playa, es necesario reservar en línea con anticipación, y la página de reserva permite reservar tu lugar dentro de las 72 horas previas a tu visita. El estacionamiento cuesta 10 euros y 1 euro por persona. No hay comida ni servicios disponibles en la playa, así que necesitarás traer tu propia comida y mucha agua. Sin embargo, hay un bar en el estacionamiento que vende bebidas, pizzas, sándwiches y frutas locales a precios honestos. Incluso compramos algunas melocotones y albaricoques de su tierra en nuestro camino de regreso a casa, ¡y estaban deliciosos! La playa tiene un agua verde impresionante y una playa de arena blanca. Los mejores momentos para disfrutar de los colores son temprano por la mañana hasta las 12 y el atardecer a partir de las 6 pm. El estacionamiento cierra a las 9 pm, así que asegúrate de regresar a tiempo. La caminata a la playa es de aproximadamente 2 km y tarda unos 30 minutos. El camino es fácil en su mayoría, pero hay una colina empinada en el camino de regreso que requiere un poco de esfuerzo. Sin embargo, la mayoría del camino está sombreado por árboles, lo que ayuda a mantenerte fresco. Esta es una playa salvaje, así que no esperes pagar por sombrillas o tumbonas. Nos encantó nuestra visita y planeamos regresar a finales de septiembre cuando no esté tan concurrido.