Solía venir aquí todos los veranos durante unos 6 años y es un lugar verdaderamente hermoso. Es un lugar divertido para traer a tus hijos, donde podrás explorar la vida marina, como los erizos de mar y los peces de colores. Lo mejor de esta playa es su belleza natural y su sensación de libertad. Rodeada de vegetación y rocas, no es una playa comercializada, es privada, por lo que puedes traer tu propia sombrilla y juguetes sin tener que pagar. Algunos días puede estar un poco lleno de gente, pero eso es raro. Le daría 4 estrellas, pero está algo estropeado. Para mí tiene un valor nostálgico especial, por eso no le he dado una puntuación más baja. La playa solía ser clara y refrescante, pero ahora parece más un lago fangoso. Ampliaron la playa y agregaron más actividades, pero no es la misma experiencia. Solo ten cuidado con la pequeña boya blanca y la boya marrón, que marcan un tubo en forma de T y una jaula con un tubo en forma de T en su interior. Pueden parecer aterradores, pero son inofensivos; incluso pueden empezar a hacer burbujas después de un tiempo. Aún así, toparse con ellos puede dar un poco de miedo, así que tenga cuidado.