Esta playa es una vista impresionante, con sus brillantes guijarros blancos y aguas cristalinas. Pero no te dejes engañar por su belleza, ya que el mar aquí es profundo y las olas pueden ser bastante feroces. La buena noticia es que no necesitas zapatos especiales para enfrentar las aguas.
Pero prepárate para gastar algo de dinero si quieres disfrutar de la playa con comodidad. Un mísero paraguas y dos sofás te costarán 1000 lek/d. Y aunque la situación de la basura ha mejorado, todavía hay mucha basura esparcida por ahí.
Afortunadamente, hay muchos restaurantes y hoteles a lo largo de la costa, aunque solo uno acepta el pago sin contacto. Si estás con un presupuesto ajustado, es mejor quedarse en la ciudad y hacer el viaje a la playa. De lo contrario, prepárate para pasar de 1 a 2 horas en tránsito.